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Trucos para dejar de procrastinar

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Quizás ya sabes lo que es, o quizás no sabes del todo el significado de la procrastinación, lo que sí te aseguramos es que es MUY probable que lo hagas más a menudo de lo que crees y por eso creemos que estos trucos para dejar de procrastinar te van a venir de maravilla.

¿Qué es la procrastinación?

La procrastinación es el acto de retrasar o aplazar las tareas hasta el último minuto o después de su fecha límite. Algunos investigadores definen la procrastinación como una «forma de falla de la autorregulación caracterizada por el retraso irracional de las tareas a pesar de las consecuencias potencialmente negativas».

¿Por qué aplazamos las tareas?

A menudo asumimos que los proyectos no tardarán tanto en finalizar como realmente lo harán, lo que puede generar una falsa sensación de seguridad cuando creemos que todavía tenemos mucho tiempo para completar estas tareas.

Uno de los factores más importantes que contribuyen a la procrastinación es la noción de que tenemos que sentirnos inspirados o motivados para trabajar en una tarea en un momento determinado pero la realidad es que si esperas hasta estar en el estado de ánimo adecuado para realizar ciertas tareas (especialmente las indeseables), probablemente encontrarás que el momento adecuado simplemente nunca llega y la tarea nunca se completa.

Trucos para dejar de procrastinar

1. Organízate
No podrás realizar ningún trabajo si no sabes qué tareas deben completarse. Invierte en una agenda o comienza a usar la aplicación de calendario en tu móvil. Esto hace que sea mucho más fácil realizar un seguimiento de las asignaciones individuales y las fechas de entrega importantes.

2. Establece metas simples y alcanzables
Parte de la razón por la que posponemos las cosas es porque la tarea que tenemos entre manos parece demasiado abrumadora. Es mucho más fácil comenzar un proyecto cuando estableces metas simples y alcanzables en lugar de un plan grande y vago. En lugar de decirse a tí mismo/a: «Estudiaré biología esta noche», di «Estudiaré el capítulo seis esta noche». Esto hace que tus metas sean menos intimidantes y más alcanzables.

3. Crea un cronograma/programa
Después de establecer los objetivos, crea una línea de tiempo para completarlos. Este podría ser un cronograma de estudio para un examen que se aproxima («El martes estudiaré el capítulo cinco y el miércoles estudiaré el capítulo seis»), o podría ser el diseño de un ensayo que tienes que escribir ( “El sábado escribiré la introducción y la conclusión”). Dividir una tarea en pequeñas partes con el tiempo la hace mucho más manejable.

4. Fija una fecha límite
Mucha gente queda atrapada en el ciclo de «algún día, organizaré mis notas». La verdad es que “algún día” nunca llega. Es importante establecer una fecha específica en la que deseas que se cumplan tus objetivos. Si tienes una tarea pendiente, intenta completarla con uno o dos días de anticipación. De esa manera, si sucede algo inesperado, aún tienes tiempo adicional para completarlo.

5. Deshazte de las distracciones
Es importante deshacerse de todas las posibles interrupciones antes de comenzar a trabajar para que no te desvíes innecesariamente en mitad de la tarea. Si tiendes a pasar demasiado tiempo en TikTok o Instagram cuando deberías estar estudiando, apaga el teléfono (completamente apagado).

6. Tómate un descanso
Es importante tomar un respiro mental del trabajo de vez en cuando. Cuando suene el cronómetro, tómate un descanso de 10 a 30 minutos. Escucha música, da un paseo… cualquier cosa que te distraiga del trabajo y te permita relajarte.

7. Utiliza incentivos
A todos nos encanta ser recompensados. Es importante darse incentivos, por pequeños que sean. Podría ser algo tan simple como: «Si trabajo en esta tarea durante una hora, veré un episodio de mi programa de televisión favorito esta noche». Es más fácil prestar atención cuando hay algo en juego.

8. Primero haz las cosas más difíciles
Esto puede hacer que desees retrasar todo más. Es difícil hacer algo que no quieres hacer. ¿Pero adivina que? Una vez que lo hagas, ¡se acabó! Es mejor completar primero las tareas más desafiantes. De esa manera, todo lo que sigue parece más fácil y lleva menos tiempo.

9. Cuéntale a alguien tus objetivos
Es fácil olvidarse de las asignaciones o posponerlas si eres la única persona que se hace responsable. Si realmente quieres hacer algo, díselo a un amigo o familiar. Ahora hay alguien que te hace responsable de tus objetivos. No puedes echarse atrás o deshacerte de la tarea. Como beneficio adicional, también tienes a alguien con quién celebrar tus victorias, por pequeñas que sean.

*Además de estos trucos para dejar de procrastinar, haz click aquí para leer nuestro artículo sobre «Cómo mantener al día las tareas en la universidad»

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