Tu último año en la universidad es grande en muchos sentidos, no solo porque es probable que te inunden gran cantidad de trabajos y exámenes, sino porque además, estás a punto de terminar un gran capítulo de tu vida.

Como tal, es importante que tomes buenas decisiones que te beneficien, tanto personales como académicas.

Gran proporción de estudiantes dice haber tenido el mejor momento de su vida mientras vivía en una residencia universitaria.

Por lo general, los estudiantes se mudan de la residencia universitaria a una casa después de su primer año, pero cuando se trata del último año, habría que plantearse la posibilidad de volver a la vida en un alojamiento estudiantil… ¿Quieres saber por qué?

Razones para regresar a residencia universitaria el último año

Las residencias universitarias suelen estar cerca del campus

Las residencias universitarias suelen estar en una ubicación mucho mejor que la mayoría de casas que se alquilan a estudiantes. Si quieres vivir cerca del campus es probable que los pasillos de una residencia sean tu mejor opción.

Como estudiante de último año, no querrás perder un tiempo precioso de estudio caminando de ida y vuelta por toda la ciudad de tu casa hasta la biblioteca y el hogar nuevamente. Lo quieres todo en tu puerta. ¿Y dónde conseguirlo mejor que en una residencia universitaria?

No tendrás que preocuparte de problemas inesperados

¿Los desagües están bloqueados? ¿La lavadora está rota? ¿Tienes extras que pagar? ¿Sí? ¡Buena suerte resolviendo todo eso si no estás en residencia universitaria!. Estando en una residencia cualquier problema de este tipo se resolverá con bastante rapidez.  

Si vives en un piso alquilado, es poco probable que recibas orientación sobre qué hacer si algo anda mal y terminarás teniendo que pedirle a alguien que lo arregle…

Además, (generalmente) en la residencia universitaria, las facturas por arreglos, electricidad, etc. están incluidas, por lo que te olvidarás del estrés que generan las facturas cada mes.

Tu último año en la universidad es ya lo suficientemente estresante sin todas estas preocupaciones adicionales que matan tu ambiente. ¡Busca lo práctico!

Obtendrás equilibrio entre el tiempo a solas y la socialización

Si quieres vivir solo el último curso, vivir en residencia de estudiantes podría ser una gran solución.

Probablemente no puedas permitirte un bonito apartamento tipo estudio para ti solo, pero podrías optar por una habitación individual. ¡Te beneficiarás de todas las ventajas sin tener que compartir espacio!

Las residencias de estudiantes cuentan con áreas comunes, por lo que si deseas tener tiempo para socializar, podrás hacerlo entrando a una sala de estar común. Podrás conversar antes de irte a la cama en tu propio santuario privado al final del día.

Por lo tanto, ¡no tengas miedo de salir del molde y regresar a la residencia universitaria como estudiante de último año maduro!