¡Septiembre está aquí, y una vez más ha llegado demasiado rápido! ¿Tienes un plan para volver a la universidad después de los largos y hermosos días que has disfrutado durante los meses de verano?

Hoy en nuestra residencia para estudiantes en Sevilla te proponemos 3 maneras para prepararte y avanzar en la dirección correcta. Si bien esta no es una lista exhaustiva de lo que puedes hacer para prepararte completamente para las clases, puede ayudarte (y mucho).

Prepara un plan de salud mental

Lo primero para prepararse para la universidad tras el verano, es centrarse en la salud mental, ésta es extremadamente importante. Sin ella, no podrías hacer la mayoría de las cosas que haces a diario. Hay que estar preparado/a, regresar a la universidad puede ser extremadamente estresante y agotador.

Si sabes de antemano que es posible que te sientas un poco estresado/a en las próximas semanas cuando encuentres tus nuevas aulas, te aconsejamos que conozcas nuevos amigos y compañeros y comiences a estudiar el material más difícil del curso, estarás en una mejor posición para lidiar con el aumento de los niveles de estrés.

> La salud mental es un problema creciente y frecuente para los estudiantes de educación superior y secundaria, por eso se necesita estar preparado/a para situaciones estresantes, por eso hay que planificar con antelación.

Elaborar un buen plan de salud mental es un gran comienzo. Como dice el refrán … «Si no planificas, planeas fracasar».

Aquí algunos consejos sobre cómo hacerlo:

En tu plan de salud mental, escribe de tres a cinco personas con las que puedes hablar cuando sientas estrés, ansia o depresión. Estas tienen que ser personas a las que conoces y en las que confías y con las que puedes hablar cuando lo necesitas. Pueden ser compañeros, maestros, padres y otros miembros de la familia, o una combinación de individuos de estos diferentes grupos.

Luego, escribe sus números de teléfono y direcciones de correo electrónico junto a sus nombres para que puedas acceder fácilmente a estas personas cuando las necesites.

También es aconsejable que escribas recordatorios de actividades que disfrutas, lugares a los que puedes ir cuando estés estresado y necesites sensación de seguridad…

Escribe actividades que disfrutes y te relajen. Tal vez podrías escribir algo así como: «Tocar el piano», «ver un partido de fútbol», «unirse al club de lectura» o «ir al gimnasio».

Escribe dónde te sientes seguro/a. Escriba las cosas que sientes que te mantendrán más tranquilo/a y concentrado/a durante los momentos estresantes.

La última parte del plan de salud mental es escribir una declaración afirmativa  que te ayude a sentirte positivo/a. Algunos ejemplos de lo que podrías escribir: “Soy suficiente”, “Soy amado, no importa cuántos altibajos pase”, o cualquier cosa que te ayude a sentirte fuerte y amado.

Escribir este plan no significa que no vayas a sentirte estresado/a, pero te apoyará en la temporada de regreso a la universidad.

Despeja tu escritorio para concentrarte en el estudio

¡Hazte un favor; no comiences el curso universitario con un escritorio desordenado! Esta es una de las maneras de prepararse para la universidad tras el verano, más fácil e importante.

Para conseguir un estado de ánimo adecuado para el regreso a la universidad, asegúrate de que tu espacio de trabajo (e incluso tu espacio físico, como tu dormitorio o sala de estar) esté despejado y ordenado. Una mente clara es igual a un espacio libre y viceversa.

Si crees que tu escritorio no está de la forma adecuada para trabajar productivamente, probablemente necesite una buena limpieza.

Deshazte de todo lo del año pasado; boletos de cine, recibos, cuadernos que ya están llenos, y cualquier cosa que no necesites este próximo año universitario que crees que te pueda distraer.

Haz una nueva carta de presentación y revisa tu CV

¡Escriba una nueva carta de presentación y revisa tu currículum vitae para aumentar las posibilidades de obtener un trabajo en el campus!

A lo mejor te han dicho muchas maneras de prepararse para la universidad tras el verano, pero no has caído en esto.

Trabajar durante el año universitario será una excelente manera de conocer gente nueva en todo el campus, mejorar tus habilidades sociales y desafiarte a ti mismo. ¡Aquellos que están involucrados en actividades extracurriculares y trabajos que no están relacionados con el trabajo universitario a menudo disfrutan de GPA más altos! Es una forma comprobada de aumentar el GPA y obtener otros grandes beneficios. Podrás encontrar mentores para el trabajo soñado, establecer conexiones con personas que puedan proporcionarte referencias después de graduarte, aumentar tu productividad y diversificar tu conjunto de habilidades.

Con estos consejos en mente para prepararte para la universidad tras el verano esperamos que estés listo para emprender el nuevo año universitario, ya sea que vayas a comenzar una nueva titulación o te sumerjas en el último año.